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Cómo usar el aceite de árbol de té en la cara

El aceite de árbol de té puede convertirse en un gran aliado para llevar a cabo diversos tratamientos estéticos y saludables. Este producto cuenta con multitud de propiedades que le otorgan diversos poderes, desde el antiséptico hasta otras múltiples actuaciones beneficiosas para nuestro organismo: antiinflamatorio, cicatrizante, desodorante, balsámico... Estos grandes usos populares de este aceite esencial lo han convertido en un imprescindible para garantizar el cuidado de tu piel. ¿Quieres saber más? Entonces, continúa leyendo este artículo que hemos preparado para ti en unComo.com. En esta ocasión, te hablamos de cómo usar el aceite del árbol de té en la cara. Descubre sus usos estéticos y terapéuticos y benefíciate de todo el poder de este aceite esencial. ¡Notarás los resultados!

Propiedades del aceite de árbol de té

El aceite de árbol de té se obtiene gracias a la destilación de las hojas del Malaleluca Alternifolia, nombre que se le da a esta planta originaria de Australia. La pureza del árbol de té garantiza todas sus propiedades y poderes, desde los antisépticos, antibacterianos y antifúngicos, como sus beneficios antiinflamatorios, desodorantes, cicatrizantes, expectorantes o balsámicos, entre otros. Pero si por algo es conocido el aceite de árbol de té, es por su poder de mejorar, reducir y eliminar el acné del rostro, así como otras infecciones o afecciones que se presenten en el cutis, como las verrugas, la piel seca, los eccemas, la psoriasis o las quemaduras.

Pero aunque su aplicación más común sea en los tratamientos de belleza del rostro, el aceite de árbol de té tiene otras muchas aplicaciones. Por ejemplo, es útil para tratar el cabello, ya sea seco o graso, puesto que ayuda a combatir la caspa y cuida el cuero cabelludo de irritación o picor. También puede usarse este aceite esencial para tratar padrastros o uñeros y su función antifúngica te ayudará también a combatir los hongos de las uñas. Por otro lado, es útil para cicatrizar heridas y reparar quemaduras leves en la piel y, al mismo tiempo, puede usarse como un buen repelente de mosquitos y calmar el picor posterior. Y no podemos olvidar que también puede utilizarse para sanar la costra láctea de los bebés o la dermatitis. Por último, el árbol de té también tiene el poder de sanar placas bacterianas de la garganta, curar la gingivitis, las aftas bucales o combatir la halitosis. ¡Un producto natural y 100% saludable!

Amplía esta información consultando el artículo Para qué sirve el aceite del árbol de té, sus propiedades y contraindicaciones.

Usos del aceite de árbol de té

Como hemos destacado anteriormente, el aceite de árbol de té es muy utilizado para combatir problemas cutáneos, entre los que destaca la aparición de acné en el rostro. Si deseas emplearlo para tratar esta afección cutánea y mejorar la apariencia de tu piel, puedes llevar a cabo diferentes tratamientos como los que te mostramos a continuación, pues este aceite penetrará en tu piel desbloqueando las glándulas sebáceas y, por ende, desinfectando el cutis y evitando, así, la aparición de granitos, espinillas, puntos negros u otras imperfecciones.

  • Aplicar directamente sobre los granos. Recuerda que este aceite esencial cuenta con propiedades antibacterianas que frenarán el acné. Para beneficiarte de sus efectos, debes colocar unas gotas del aceite puro sobre un algodón o un pañuelo suave y frotar cuidadosamente las espinillas, granitos o puntos negros de tu rostro, el cual debe estar previamente seco. Deja que el aceite haga su efecto durante unas horas, preferiblemente durante la noche. Si el acné es leve, en unos días notarás cómo disminuye, si es más grave necesitarás unas semanas para notar los resultados.
  • Para todos aquellos que noten que el aceite de árbol de té puro les reseca la piel, el truco está en diluirlo con unas cucharadas pequeñas de aloe vera. Después, aplícalo directamente sobre los granitos. También puede mezclarse con miel, un producto que también cuenta con propiedades antibacterianas. Sigue los mismos pasos de aplicación directa sobre el granito.
  • La mascarilla, nunca falla. Si eres de las que se preparan máscaras faciales a menudo, te recomendamos añadir, la próxima vez, unas gotas de aceite de árbol té. Con esta mezcla, conseguirás matar las bacterias que residen en tu cutis y a la vez secar los granitos para eliminar de una vez el acné. Añade el aceite en tus mascarillas compradas o caseras, funciona igual de bien.

Este no es el único aceite que puede servirte para ganarle la batalla al acné, descubre otras buenas opciones en el artículo Aceites esenciales para el acné.

Aceite de árbol de té en jabones y más

Además de aplicarlo de manera directa o mediante mascarillas faciales, puedes disfrutar del poder y la eficacia del aceite de árbol de té añadiéndolo a tus limpiadores faciales, como cremas limpiadoras, humectantes o desmaquilladores. Con esta técnica, no solo mantendrás sano y cuidado tu cutis sino que también ayudarás a eliminar cualquier imperfección.

Por otro lado, puedes agregar algunas gotas de este aceite esencial a tu agua de baño para conseguir que la eficacia del producto no solo se aplique en la cara, sino que también actúe en toda tu dermis, eliminando los granitos de cualquier parte de tu cuerpo.

Por último, debes saber que ya existen múltiples productos para el cuidado de la piel que contienen aceite de árbol de té y se benefician de su poder y eficacia. Tienes la opción de comprar productos limpiadores, geles y humectantes con la presencia de este aceite esencial. ¿A qué esperas para descubrirlos?

Mascarilla exfoliante con aceite de árbol de té

Hemos destacado la efectividad del uso de aceite de árbol de té sobre la piel, ya sea mediante aplicación directa, en mascarilla o agregándolo a tus jabones y otros productos de limpieza corporal, pero si queremos que el resultado sea total, te proponemos preparar tu propia máscara facial hidratante, exfoliante y reparadora. Con esta fórmula, conseguirás cuidar tu piel y combatir el acné más rebelde. Para prepararla necesitarás: azúcar, aceite de oliva o de sésamo, miel y aceite de árbol de té.

Preparación: mezcla en un pequeño cuenco media taza de azúcar con un cuarto de taza de aceite de oliva o sésamo. Añade, también, una cucharada de miel y unas 10 gotas de aceite de árbol de té.

Una vez tengas la mascarilla exfoliante preparada, colócala sobre tu rostro masajeándolo durante unos 5 minutos suavemente con movimientos circulares. Cuando finalices este ritual, date unos pequeños golpecitos con las yemas de los dedos por todo el rostro y después enjuágate la cara con abundante agua tibia.

¿Qué conseguirás con esta mascarilla exfoliante? En primer lugar, suavizar la piel y eliminar cualquier impureza o célula muerta de manera natural. Piensa que es una máscara facial casera libre de cualquier añadido químico, por lo que es menos agresiva que otros cosméticos. Por otro lado, tanto la miel como el aceite de árbol cuentan con múltiples propiedades antibacterianas que te ayudarán desbloquear las glándulas sebáceas de tu rostro y, por ende, hacer que granitos, espinillas o puntos negros desaparezcan.