Originario de Marruecos, el aceite de argán ha llegado hasta nosotras y rápidamente se ha convertido en unos de nuestros productos de belleza favoritos. Su gran éxito se explica porque es el aceite que más cantidad de vitamina E contiene, el mejor antioxidante con el que podemos nutrir nuestra piel, pues la hidrata y favorece su juventud, evitando además la aparición de arrugas y líneas de expresión prematuras. Si aún no has comprobado los increíbles efectos que tiene este líquido dorado sobre el cutis y no sabes de qué forma utilizarlo para aprovechar todas sus propiedades, ¡no te preocupes! En este artículo de unComo te mostramos todo lo que necesitas saber para usar el aceite de argán en la cara correctamente.
Propiedades del aceite de argán para la piel
El uso del aceite de argán es altamente recomendable para el cutis gracias a su composición, la cual incluye muchísimas vitaminas, minerales y componentes antioxidantes que son perfectos para cuidar la piel desde el interior y lograr que luzca mucho más radiante. A continuación, te detallamos todas las propiedades de este líquido dorado para la piel, así te convencerás de lo mucho que este producto puede hacer por tu belleza:
- Es muy hidratante: es un aceite rico en ácidos grasos insaturados, los cuales permiten conservar la estructura celular de la piel y retener el agua en la misma. Esto hace que los niveles de hidratación de la dermis sean los adecuados y no se sufra de sequedad o tirantez.
- Es un producto antiedad: cuenta con muchísimos antioxidantes, como las vitaminas C y E, que neutralizan la acción de los radicales libres y, por tanto, evitan el envejecimiento de los tejidos de la piel. Restaura el metabolismo natural disminuyendo la presencia de arrugas y le aporta el cutis muchísima más elasticidad.
- Mantiene la piel suave y sedosa al tacto.
- Es un buen aliado para el acné: además de reducir la inflamación que puede provocar esa afección cutánea, ayuda a atenuar y eliminar aquellas cicatrices o marcas que dejan los granitos.
- Es un aceite que se absorbe con muchísima facilidad y que no obstruye los poros, motivo por el que está recomendado para tratar todo tipo de pieles.
Aceite de argán para prevenir y reducir arrugas
Gracias, sobre todo, a su contenido en vitamina E, el aceite de argán es un gran producto para retrasar la aparición de los signos de la edad en el rostro y para mantener una piel joven y bonita. Si quieres emplearlo como loción antiedad, puedes hacerlo de dos formas distintas: aplicándolo en solitario o preparando una mascarilla antiarrugas con el como ingrediente principal.
Aplicación directa
Si deseas usar el aceite de argán en la cara directamente, tan solo tendrás que verter unas 5 gotas sobre la yema de los dedos y, luego, extenderlo por el rostro haciendo masajes circulares. Empieza desde la barbilla y ve ascendiendo poco a poco hasta llegar a la zona de los pómulos, realizando en todo momento suaves círculos con los dedos. Cuando llegues a la frente, empieza el masaje desde el centro de esta hacia el exterior. Una vez que hayas acabado, espera unos minutos hasta que la piel haya absorbido por completo el aceite.
Recuerda hacer este tratamiento siempre sobre la piel completamente limpia para obtener buenos resultados y, preferiblemente, por la noche para que el producto pueda actuar durante más horas. A la mañana siguiente, lávate la cara con abundante agua tibia o fría y ¡listo!
Mascarilla antiarrugas
Además del tratamiento anterior, también puedes aplicarte la siguiente mascarilla de aceite de argán una vez a la semana para contribuir a la regeneración de la piel y prevenir la aparición de arrugas. Para empezar, necesitas reunir los siguientes ingredientes:
- 2 cucharadas de aceite de argán
- 2 cucharadas de aceite de almendras
- 1 cucharada de glicerina líquida
Preparación: calienta al baño María el aceite de argán, el aceite de almendras y la glicerina. Cuando los ingredientes se hayan integrado, retira del fuego y espera a que la mezcla se enfríe. Luego, aplícala por todo el rostro dejando actuar durante unos 20 minutos y, finalmente, retira con agua tibia o fría.
Este no es el único aceite que puedes utilizar para luchar activamente contra el envejecimiento de la piel, descubre qué otras opciones tienes a tu alcance consultando el artículo Aceites naturales para eliminar arrugas.
Aceite de argán para hidratar la piel
Cuando la piel del rostro revela una falta de hidratación, luce reseca, escamosa y con zonas más enrojecidas y tirantes. Ante esta situación, el aceite de argán es el producto más reparador y nutritivo que puedes usar para solucionar estos problemas y proporcionarle muchísima más suavidad a tu cutis.
En este caso, puedes agregar unas gotas de aceite de argán a tu crema facial habitual para enriquecerla y potenciar su efecto hidratante, además de darle una nueva acción antiedad.
Otra estupenda opción es preparar la siguiente mascarilla nutritiva y aplicarla sobre la piel del rostro limpia una o dos veces por semana:
Ingredientes:
- 10 gotas de aceite de argán
- 2 cucharadas de yogur natural sin azúcar
- 1 cucharada de miel
Preparación: primero, mezcla el yogur natural y la miel en un recipiente y cuando hayas obtenido una crema homogénea, agrega el aceite de argán y remueve. Aplica la mascarilla sobre la piel con la ayuda de un pincel o brocha, dejar actuar durante 20 minutos y, luego, retira con agua tibia o fría.
Mascarilla antiacné con aceite de argán
Las pieles con acné también pueden beneficiarse de las bondades del aceite de argán, pues es excelente para reducir la inflamación de los granos, renovar la piel dañada y evitar que los poros se obstruyan dando lugar a nuevas impurezas. Además, sirve para reducir todas las marcas o cicatrices que esta afección cutánea pueda causar en el rostro.
En esta ocasión, te recomendamos usar el aceite de argán junto a la cúrcuma, otro producto perfecto para tratar el acné, de la siguiente manera: mezcla 2 cucharadas de cúrcuma con 10 gotas de aceite de argán y aplica la mezcla obtenida sobre el rostro con un pincel o brocha y deja actuar durante 15 minutos. Pasado este tiempo, retira con agua tibia o fría. Repite el tratamiento unas 2 o 3 veces por semana si quieres obtener resultados rápidos.
Descubre más tratamientos como este consultando el artículo Cómo hacer mascarillas caseras para tratar el acné.
Tónico facial de aceite de argán
Los tónicos faciales son productos que ayudan a eliminar definitivamente los residuos y la suciedad acumulados en el rostro después de lavarlo, además de a cerrar los poros. Con el aceite de argán, puedes elaborar un tónico casero muy sencillo e ideal para dejar tu piel completamente limpia y con una luminosidad especial.
Mezcla 2 cucharadas de agua de rosas con unas 5 gotas de aceite de argán y aplica un poco de esta solución por todo el rostro con la ayuda de un disco de algodón cuando hayas finalizado la limpieza facial.