Las manchas en la piel son una de las alteraciones estéticas de la piel que más preocupan a las personas, pues es común en mujeres y hombres, se producen a cualquier edad y están presentes en gran parte de la población. Su principal causante es el sol, aunque hay otros factores a tomar en cuenta como los trastornos hormonales, la medicación y los productos cosméticos.
En esta oportunidad, en unCOMO, te explicamos todos los tipos de manchas en la piel y cómo tratarlas o quitarlas. Para saber si el tratamiento será efectivo, primero es importante conocer las causas de las manchas en la piel. De esta forma, también se podrá deducir si puede volver a aparecer o si se puede eliminar de forma más permanente.
Por qué salen manchas en la piel
Los melanocitos son células productoras de melanina, una sustancia que juega un rol muy importante en la protección de la piel contra los rayos solares. Dicho esto, una mancha es una alteración del melanocito que produce un exceso de melanina y, a su vez, este exceso de pigmento pasa a las células que están a su alrededor: los queratinocitos. Estos son los que, a través del proceso natural de regeneración de la piel, suben a la superficie de la piel y se hacen visibles.
El principal estímulo para que el melanocito se ponga en marcha para producir melanina es el sol. No obstante, existen muchos otros factores que pueden producir esta alteración y provocar la aparición de manchas con más facilidad, tales como las hormonas, los tratamientos médicos, las cicatrices, entre otros. Cada factor ejerce una agresión en la piel de forma indirecta. Por ello, la mayoría de las causas están relacionadas con una inflamación o un daño cutáneo.
Tipos de manchas en la piel
El tipo de mancha nos da la pista para saber cuál es el motivo por el cual la piel se ha manchado. Es lo primero que cualquier especialista de la piel debería detectar antes de empezar con un tratamiento despigmentante. Esto será clave para comprender el origen de la hiperpigmentación y, de esta manera, saber si es posible tratarlo de forma definitiva, así como también saber cuál es el mejor método para prevenir que la mancha se haga más grande.
Manchas solares
Es conocido que la piel tiene memoria. Las quemaduras solares, sufridas repetidas veces y a lo largo del tiempo, hacen que la estructura interna de la piel reciba daño, pues ha pasado por numerosas inflamaciones y peladuras. Como defensa, la piel genera su propia protección natural a base un exceso de melanina y se producen las famosas manchas por el sol.
Manchas post-depilatorias
Estas manchas suelen aparecer en las zonas donde nos realizamos la depilación, ya sea con cera caliente, tibia, e incluso con láser. Si no respetamos un tiempo mínimo de recuperación de la piel y, al cabo de unas horas nos exponemos directamente a tomar el sol sin protección, incrementamos el riesgo de que aparezcan manchas.
Lo que sucede es que en la zona depilada ha habido una agresión producida por estar en contacto con las altas temperaturas y el fuerte tirón. Esto produce un enrojecimiento en la piel, creando un eritema y una inflamación cutánea. Si a esto le sumamos la exposición solar en la zona donde la piel está muy sensible, puede que esta termine desarrollando manchas. Una zona muy común donde suele aparecer este tipo de manchas es en el labio superior, las ingles, las axilas o cualquier otra zona depilada.
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Manchas por consumo de medicación
Hay medicación que puede ser fotosensible, debido a sus activos regeneradores que afinan la estructura superficial de la piel, volviéndola más frágil y sensible. Estas manchas pueden lucir irregulares y pueden aparecer en cualquier zona que haya estado expuesta a la radiación solar.
Manchas hormonales
Las manchas hormonales son muy comunes en personas que consumen medicación hormonal, como por ejemplo las pastillas anticonceptivas, DIU u otros metodos anticonceptivos a base de hormonas. Suelen ser muy comunes entre las manchas en la cara.
Son manchas simétricas que aparecen en ambos lados de la cara. Una muy común es la mancha del labio superior, la mancha en la frente y la mancha mariposa, una mancha que sale en ambas mejillas del rostro como si fuera una mariposa con las alas abiertas.
Manchas de embarazo
Las manchas durante el embarazo tienen un aspecto muy similar que las manchas producidas por alteraciones hormonales, pues el motivo de su aparición es muy similar. En este caso, hay que ser consciente que las manchas pueden salir durante el embarazo y también pueden salir durante el proceso de lactancia.
Durante el embarazo y la lactancia, la piel está más fotosensible de lo normal, por lo que es importante no olvidar protegerla con protector solar.
Manchas post tratamientos láser
Los tratamientos láser también pueden ser causantes de la aparición de manchas. Aunque muchas veces es un método que se utiliza para despigmentar la piel, el láser es agresivo y puede generar un eritema. La alta temperatura enrojece la piel casi hasta el punto de llegar a una quemadura para provocar que la piel active su proceso de regeneración y, de esta manera, se elimine la melanina acumulada en la piel. El problema es que si después no se lleva a cabo una protección adecuada y constante, la mancha puede volver a salir más rápido y más oscura que antes.
Manchas por productos despigmentantes
Muchos cosméticos que existen para aclarar las manchas de la piel tienen una alta concentración de activos que, a su vez, pueden producir fotosensiblidad en la piel. Estos activos, al igual que el láser, ejercen una acción de regeneración sobre la zona a tratar.
Es importante respetar las recomendaciones del fabricante o preguntar a un especialista para que te pueda asesorar en la prescripción del tratamiento, cuál es la concentración de activos idónea según el tipo de mancha, cuál sería la rutina ideal para aplicar el producto y cuál es la época del año más indicada para realizar estos tratamientos.
Manchas por deshidratación
La falta de hidratación en la piel puede producir que la piel se manche con más facilidad, debido a que no logra broncearse de forma uniforme y el color de la piel acaba siendo irregular.
Una de las principales causas de la piel deshidratada es el uso de productos de higiene para el rostro con alta concentración de activos detergentes. Estas manchas tienen una apariencia irregular y difusa, suelen aparecer en zonas como las mejillas y alrededor del mentón y la frente.
Manchas por cicatrices o heridas
La zona donde hemos tenido una herida abierta en la piel, una agresión cutánea o una inflamación localizada es una zona propensa a las manchas. Esto se debe a que la piel queda más frágil y sensible al sol tras pasar por un periodo de inflamación.
En esta categoría entran también las manchas del acné o aquellas que salen después de sufrir una herida o haber pasado por una cirugía.
Cómo quitar las manchas de la piel
Para tratar las manchas correctamente, todos los tratamientos o rutinas deben estar compuestos de tres aspectos fundamentales que te ayudarán no solo a quitar las manchas de la piel, sino también a evitar que vuelvan a aparecer o se oscurezcan aún más.
- Protección solar: desde que comienzas a tratar las manchas, es importante que seas constante en el uso de un protector solar. Solo así prevendrás que las manchas existentes se oscurezcan y que salgan manchas nuevas en el futuro. Puedes comprar protector solar en Amazon de diferentes composiciones y texturas.
- Tratamiento aclarador: los productos que ofrecen acciones aclaradoras en la piel siempre tienen ingredientes como la vitamina C, el retinol, el ácido glicólico, entre otros. Estos compuestos permiten aclarar y eliminar la mancha en la superficie hasta unificar el tono de la piel. Lo mejor es que puedes encontrar sérum facial de retinol y vitamina C en Amazon para empezar a tratar las manchas de la cara. Es importante que todos estos tratamientos estén supervisados por un profesional que te ayude a combinar los productos, asegurar resultados, evitar efectos rebotes y elegir la mejor época para realizarlos. Esta época suele ser a partir del otoño, pues pueden aclararse las manchas aparecidas en el verano.
- Tratamiento de mantenimiento: el resto del año, durante la primavera y el verano, se puede complementar el tratamiento con productos que relajen el melanocito para reducir así el exceso de producción de melanina y evitar que la piel se oscurezca con los primeros rayos del sol.
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