El aceite de chía es una sustancia que se extrae de las semillas de una planta de la familia de las lamiáceas que se conoce con el nombre de Salvia Hispánica, la cual crece de manera silvestre en las regiones más tropicales de América del Sur. Este aceite destaca por ser muy rico en ácidos grasos saludables como el omega 3 y en otros nutrientes, como las proteínas y varias vitaminas, que le proporcionan diversas propiedades beneficiosas para la salud.
Aunque sus usos más conocidos son como suplemento para adelgazar y como tratamiento antiinflamatorio, también puede resultar muy eficaz para el cuidado de nuestra piel. Es por ello que, en este artículo de unCOMO, te explicamos las diferentes propiedades del aceite de chía para la piel.
Es un poderoso antioxidante
El aceite de chía tiene unas excelentes propiedades antioxidantes debido a su riqueza en vitamina E. Gracias a estas propiedades, nos ayuda a proteger nuestra piel de numerosos agentes externos como la contaminación, los rayos UVA y de los radicales libres, los cuales aceleran el proceso de oxidación de las células.
Por lo tanto, previene algunos problemas de la piel, como la aparición de manchas oscuras y ayuda a mantenerla suave y joven.
Reduce las arrugas y previene el envejecimiento
Una de las propiedades del aceite de chía para la piel más conocidas son sus propiedades antienvejecimiento, las cuales se dan por los siguientes nutrientes:
- Zinc: es un oligoelemento esencial para la producción de colágeno y elastina. Además, también contiene propiedades de regeneración celular que previenen las arrugas.
- Vitamina E: gracias a sus propiedades antioxidantes, que reducen los daños de los radicales libres, también previene el envejecimiento prematuro producido por estos agentes dañinos.
- Magnesio: también contiene propiedades regeneradoras que mantienen hidratadas las células y nos protege de las sustancias que reducen la elastina de la piel.
- Proteínas: aumentan los niveles de colágeno, lo cual se traduce en una piel más joven y tersa.
Aceite de semillas de chía para la piel con acné
El aceite de chía se puede utilizar para tratar el acné gracias a su gran contenido en ácidos grasos saludables, especialmente en omega 3. El omega 3 es un ácido graso que cuenta con propiedades que regulan los niveles hormonales de nuestro organismo. Una alteración hormonal puede provocar problemas en la piel como acné, sequedad y otras imperfecciones de la piel.
Además, de este ácido graso, también contiene otros nutrientes que también funcionan como reguladores hormonales. Uno de ellos es el zinc, que además de tratar las arrugas, también ayuda a reducir algunas imperfecciones de la piel, como el exceso de brillo y sebo y las espinillas.
Es un excelente antiinflamatorio
La riqueza del aceite de chía en tocoferoles, fitoesteroles y en ácido grasos esenciales (omega 3) hacen que cuente con poderosas propiedades antiinflamatorias y calmantes, que son ideales para aquellas pieles que sufren resequedad u otros problemas como posibles irritaciones, rojeces y picores en la piel.
Estas propiedades también hacen que el aceite de chía sea muy eficaz para la piel del contorno de los párpados, ya que reduce la hinchazón provocada por diversos factores como estrés, insomnio y alergias, y además también disminuye las bolsas o retención de líquidos que se producen debajo de los ojos.
Otras propiedades y beneficios del aceite de chía para la piel
- Gracias a su contenido en vitaminas y minerales, es un excelente hidratante que mantiene nuestra piel en buen estado.
- Su aporte en potasio también le brinda propiedades nutritivas y fortalecedoras que previenen el cansancio visible en la piel.
- Gracias a sus propiedades regeneradoras, el aceite de chía es un tratamiento ideal para las pieles más sensibles o que sufren sequedad.
- Por último, su contenido en hierro ayuda a combatir la flacidez y, en consecuencia, a que la piel luzca más suave, tersa y viva.
Cómo usar el aceite de chía en la piel
El aceite de chía puede usarse en nuestra piel de diversas formas:
- Exfoliante facial para limpiar tu piel: mezcla el aceite de chía con aceite de coco y jugo de limón, ya que ambos contienen propiedades limpiadoras que eliminan las células muertas, aplícalo en tu rostro durante unos minutos y enjuágalo con agua fría.
- Mascarilla hidratante para pieles secas: en este caso, mezclaremos dos claras de huevo y un yogur natural con el aceite, ya que son ricos en nutrientes que hidratan profundamente la piel que, además, dejará tu piel más suave y tersa. Solo tienes que dejarla 10 minutos en el rostro y enjuagar con agua fría.
- Por último, también puedes echar unas cuantas gotas en tu crema para el contorno de ojos, ya que el aceite de chía ayudará a reducir tanto las líneas de expresión como las bolsas de debajo de los ojos.