Una de las frutas más saludables para nuestro organismo es la piña pues es rica en vitamina C, ayuda a desintoxicar el cuerpo y, además, no contiene apenas calorías. Pero ¿sabías que la piña también puede usarse para cuidar la piel? Este producto contiene la enzima bromalina que ayuda a eliminar células muertas, exfoliar el rostro y conseguir, así, una piel mucho más saludable y limpia. Gracias a sus nutrientes esta fruta también puede usarse para aclarar la piel, frenar la acción de los radicales libres y lucir un cutis perfecto. En este artículo de unComo vamos a descubrirte los beneficios de la piña para la piel para que comiences a incorporar este interesante fruto en tus tratamientos de belleza. ¡Notarás la diferencia!
La piña contra el envejecimiento de la piel
Hay numerosos beneficios de la piña cuando la incorporamos en nuestra dieta pero también puede usarse de forma tópica, es decir, aplicándola directamente sobre la piel, para aprovechar sus propiedades que puede aportarnos también de forma externa.
De hecho, uno de los usos más populares de esta fruta se basa en luchar contra el envejecimiento prematuro de la piel ya que nos aporta una gran fuente de antioxidantes, los elementos que son capaces de luchar contra los radicales libres (los responsables del envejecimiento).
Los antioxidantes que tomamos mediante la alimentación consiguen reducir la presencia de los radicales libres y, por tanto, consiguen que no se dañen nuestras células por dentro y, por tanto, nos veamos bien por fuera. También ayudan a que estemos protegidos contra enfermedades degenerativas como las cardiopatías, la artritis, etcétera.
La vitamina C que contiene esta fruta es el nutriente esencial que nos aporta los antioxidantes que previene el envejecimiento de las células y, por tanto, de nuestra piel. Por tanto, introduciendo piña en nuestros tratamientos de belleza estaremos frenando el paso del tiempo consiguiendo un cutis mucho más joven y sin arrugas.
Una piel más limpia gracias a la piña
Además de lidiar contra las arrugas, otro de los beneficios de la piña se encuentran, directamente, en su incidencia para mejorar la piel tanto por dentro como por fuera. La bromalina que encontramos en esta fruta es la encargada de conseguir eliminar las células muertas de la piel, limpiar los poros y dejar una piel más limpia, suave y uniforme; por este motivo, uno de los usos más frecuentes que se le da a la piña en los tratamientos de belleza es el de exfoliante natural.
No debemos olvidar que se trata de una fruta con un gran contenido en agua y, por tanto, conseguirá hidratar en profundidad las capas de la dermis haciendo que nuestro rostro se vea mucho más limpio, saludable y en perfectas condiciones. Además, que la piel esté nutrida es también algo esencial para evitar la aparición de arrugas.
Otro de los usos que se le da a la piña es uno por el que el limón es también muy conocido: como aclarador natural de la piel. Al igual que el cítrico, la piña es muy rica en vitamina C, un nutriente que reduce la producción de melanina, la hormona encargada de dar tono y color ala piel; por eso, con un tratamiento a base de limón o de piña podrás blanquear tu dermis reduciendo, así, las manchas, las cicatrices o las zonas oscurecidas. En unComo te contamos cómo usar el limón para aclarar la piel.
Piel más sana gracias a los beneficios de la piña
Esta fruta es ideal para mantener nuestro cutis en óptimas condiciones de salud puesto que los aminoácidos y el gran aporte de vitamina C permite que los tejidos cutáneos que estén dañados se reparen mucho más rápido. Los nutrientes de la piña fomentan la cicatrización de las heridas haciendo que cualquier lesión o marca en el rostro pueda reducirse de forma considerable (marcas de acné, manchas, arrugas, etcétera).
Pero uno de los principales beneficios de la piña para la piel es que actúa como un depurativo natural que elimina las toxinas y nos protege de agentes infecciosos externos. Tanto desde dentro como desde fuera, la piña es ideal para conseguir una piel mucho más limpia, sana y fuerte. En este sentido cabe apuntar que la bromalina también favorece la circulación de la sangre haciendo que las células de oxígeno lleguen mejor a todas las partes del cuerpo y, por tanto, nuestro cutis luzca más fresco y limpio.
Cómo usar la piña para la piel
Ahora que ya conocemos los beneficios de la piña en los tratamientos de belleza vamos a descubrirte algunos de sus usos tópicos para conseguir aprovechar todas las propiedades de esta rica fruta.
Mascarilla para limpiar la piel
Si lo que quieres es limpiar tu cutis y reducir la presencia de espinillas, acné o puntos negros, nada mejor como preparar una mascarilla de miel y piña con la que conseguiremos un rostro más limpio y depurado, además de profundamente hidratado gracias a las propiedades humectantes de la miel que, también, contribuye a la cicatrización. Necesitaremos:
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharada y media de jugo de piña
Mezcla ambos ingredientes en un recipiente y, cuando estén listos, aplica la pasta sobre tu rostro procurando que se reparta por todas las zonas excepto el contorno de ojos y labios. Deja que actúe durante 15 minutos y, después, enjuaga; repite este tratamiento 1 vez por semana y, poco a poco, notarás la diferencia.
Mascarilla para exfoliar la piel
Si lo que quieres es eliminar las células muertas y desincrustar la suciedad de los poros, nada mejor como aprovechar los beneficios de la piña y de la papaya para conseguir una piel totalmente renovada. Además, la papaya favorece la ciactrización y reduce la inflamación, por lo que es altamente recomendada para pieles grasas y con tendencia acneaica. Para hacer esta máscara necesitarás:
- 1 vaso de piña troceado
- 1/2 vaso de papaya troceada
- 1 cucharada de piel de papaya
Con la ayuda de una batidora deberás mezclar todos los ingredientes y triturarlos hasta que te quede una textura parecida a la del puré; después, tendrás que aplicar esta mezcla sobre el rostro dejar que actúe 20 minutos. Aclara con agua tibia y repite el tratamiento 1 o 2 veces por semana.
En unComo te contamos otras formas de hacer una mascarilla de piña.