El prurito o picazón se define como una sensación de malestar que lleva al deseo de rascarse. Es un síntoma muy frecuente que puede estar acompañado o no de lesiones cutáneas. El prurito puede ser localizado o generalizado, en este caso nos enfocaremos en éste último. El tratamiento depende de la causa, pero hay ciertas medidas generales que se pueden implementar.
Pasos a seguir: 1Como medida primaria se recomienda a las personas mantener las uñas cortas y limpias, y en caso de rascarse, hacerlo con la palma de la mano.
2Evitar ropas muy ajustadas y las prendas sintéticas y de lana. Utilizar de preferencia ropa holgada y de algodón.
3Evitar los baños con agua caliente. Tomar baños cortos, con jabones neutros y luego aplicar cremas humectantes.
4También puede recomendarse tomar baños de inmersión en agua tibia a la que se le agregan 2 cucharadas de aceite de oliva y un vaso de leche.
5Mantener los ambientes humidificados.
6Evitar el consumo de sustancias como café, alcohol y picante, ya que éstas incrementan la picazón.
7Pueden ser de utilidad las lociones que contienen calamina, alcanfor, mentol y fenol.
8A nivel farmacológico, lo más utilizado son los antihistamínicos. El más efectivo es la hidroxicina, su dosis habitual es de 10 mg/8 hrs.
9En pacientes que no responden a los antihistamínicos, se recomienda la doxepina que es un antidepresivo, su dosis es de 25 mg/8 hrs.