El romero es una planta con muchas propiedades beneficiosas para nuestro organismo, además de ser un gran condimento alimentario por su característico aroma que enriquece muchos platos. Pero no hace falta ingerirlo para conseguir todas sus propiedades, también podemos utilizarlo externamente. El aceite esencial de romero tiene grandes efectos para la nuestra piel y es apto para todos los tipos: seca, mixta o grasa. Aplicado sobre la cara podemos conseguir un tratamiento casero de hidratación o incluso antienvejecimiento, pues tiene propiedades antioxidantes. Se encuentra fácilmente en herbolarios pero también puedes hacerlo tú misma en casa. En este artículo de unCOMO te contamos todos los beneficios del aceite de romero para la cara y te explicamos fácilmente una receta para hacer tu propio aceite de romero y aprovechar todas las propiedades de esta planta.
Antienvejecimiento
Debido a su composición el aceite de romero es un buen antioxidante, por lo que previne la oxidación de las células. Contiene ácido rosmarínico que regenera las células. No solo es este ácido del romero que aporta esta propiedad, sino que esta planta tiene altas cantidades de componentes antioxidantes como el ácido caféico o los flavonoides, que hacen que se retrasen los efectos del envejecimiento en la piel. Además, el aceite de romero ayuda a tensar la piel que está más floja y aportarle firmeza y elasticidad y estimula la actividad y el desarrollo de las células de manera que reduce las arrugas y las líneas de expresión de la cara.
Tiene un efecto instantáneo y al aplicarlo verás tu piel más relajada, además de que hidrata las células cutáneas por lo que dará un buen aspecto a tu rostro y actuará como rejuvenecedor. Para usarlo y beneficiarte de estas propiedades aplica un poco en la palma de tu mano y date un masaje por toda la cara. Para que actúe mejor y más tiempo puedes usarlo de noche y así sus efectos actuarán durante las horas de sueño.
Nutre e hidrata la piel
El romero tiene en su composición muchos minerales como el calcio o el hierro que sirven como nutrientes, además de tener varias vitaminas y antioxidantes, como hemos visto, que también hacen esta función. Pero, además de nutrir, contiene ácidos grasos esenciales que son aquellos que el organismo necesita pero no produce sino que los obtiene de planta o alimentos, como es este caso. Las grasas forman parte de las membranas celulares y ayudan a retener el agua, lo que favorece su hidratación.
Antiinflamatorio natural
El romero es un calmante natural que se usa muy a menudo para masajes relajantes o para tratar contracturas musculares. Puedes utilizarlo para calmar y relajar tu rostro, por ejemplo si has dormido mal o descansado poco. Verás como en poco rato tienes la piel más relajada y desinflamada.
Eso sí, si tienes que usarlo es importante evitar la zona de los ojos, no debes usarlo sobre la ojera muy pegada al ojo ya que podrías irritarlo. Si esto te pasa al aplicarlo, enjuaga con agua abundante rápidamente tus ojos. Utiliza este aceite esencial dando un suave masaje por toda la cara y dejándolo actuar durante, al menos, media hora antes de retirarlo.
Anti acné
El aceite de romero tiene propiedades astringentes por lo que es muy efectivo para tratar la piel grasa. Además, también es un gran desinfectante y antiséptico que protegen a nuestra piel de las bacterias. El romero tiene en su composición taninos, que son compuestos que producen las plantas. Los taninos ayudan a tratar granos y espinillas y actúan frente a la piel grasa.
Si tienes marcas o manchas en la piel por el acné aplícate un poco de aceite de romero en la zona cada día y ya verás como, en unos días, tu piel ha mejorado bastante incidiendo en las manchas.
Solución contra dermatitis
Se considera al romero como una planta medicinal y una de sus propiedades es que actúa en afecciones de la piel como la dermatitis, el eczema o la psoriasis. Es un astringente muy efectivo en las dermatitis seborreicas debido al alcanfor que contiene.
Para aplicarlo en estos casos hay que lavar bien la zona con jabón neutro y secarla con suaves toques con una toalla limpia. Seguidamente hay que aplicar unas gotas de este aceite en las partes más afectadas de la piel con suaves toques con los dedos y dejar que se seque solo. En poco tiempo veremos como mejoran estas afecciones y se alivia mucho la piel.
El romero es cicatrizante
Como hemos visto, en la composición del romero se encuentran los taninos. Estos, además de curar espinillas y granos también curten la piel y actúan como cicatrizantes. Además, tiene propiedades regeneradoras de las células haciendo que se recupere el tejido dañado. En esta acción viene acompañada su propiedad antibacteriana haciendo que elimine los microorganismos para que la dermis pueda regenerarse y, así, las heridas se curaran mucho más deprisa y no te quedarán marcas.
Además, por estos mismos motivos, el aceite de romero sirve para las estrías que son recientes, es decir que todavía son rojas y no blancas, y logra disminuirlas al máximo si lo usamos de forma regular.
Cómo hacer aceite de romero casero
Hacer aceite esencial de romero casero es muy sencillo. Para ello solo necesitarás romero y cualquier aceite, por ejemplo aceite de oliva que todos tenemos en casa, además de un bote o contenedor para guardarlo. Es preferible que sea un tarro donde quepan las hojas de romero, para hacerlo directamente en este bote y conservarlo y mejor si es opaco para que la luz no interfiera en la maceración.
La preparación es tan sencilla como poner el romero en el recipiente y añadirle el aceite hasta que el romero esté totalmente cubierto. Tápalo y déjalo macerar durante un mes en un lugar fresco y seco. Ve moviéndolo un poco cada día pero no hace falta destaparlo, simplemente con agitarlo suavemente es suficiente. Una vez transcurrido el tiempo cuélalo y guarda el aceite resultante. Puedes aprovechar más el romero que has usado machacándolo para sacar todo su jugo y añadiéndolo al aceite. Así de fácil ya tendrás listo tu aceite de romero para usar como tratamiento.